UXDE dot Net
Infecciones y embarazo

Infecciones y embarazo

en

Es de fundamental importancia cuidar la salud de la mamá durante su embarazo, ya que el bebé que lleva en su vientre depende totalmente de ella.

Asesoró: Dra. Liliana VázquezDr. Sergio Pasqualini

Infecciones y embarazo, durante el embarazo, e incluso antes, hay que tener en cuenta algunas medidas de prevención que pueden evitar problemas durante los nueve meses de gestación. Los agentes infecciosos pueden afectar a la madre y causar problemas congénitos al bebé, malformaciones, bajo peso y hasta retraso mental. Se torna indispensable entonces la consulta médica previa a la búsqueda del embarazo para recopilar información y poder armar la historia clínica de cada mujer: antecedentes de enfermedades, vacunas recibidas, costumbres y un análisis de sangre que confirmará los datos recibidos.
A partir de esa investigación el médico brindará un listado de controles y recomendaciones para cada paciente en particular, que intentarán reducir al máximo las posibilidades de complicación del embarazo y preservar la salud del bebé por nacer.

Si bien la mayor parte de las vacunas disponibles en la actualidad no poseen efectos perjudiciales para la salud de la madre o del niño, su utilización durante los meses de gestación tiende a evitarse y se recomienda sólo en casos en que el riesgo de exposición a la enfermedad sea alto. Inclusive existen una serie de vacunas que están contraindicadas durante el embarazo: son las compuestas por virus vivos atenuados.
Dentro de sus complicaciones está la de presentar una enfermedad atenuada, producida por el virus de la vacuna. Como ejemplos podemos citar la triple viral, sarampión, rubéola y paperas, o cada componente por separado, Sabin oral, antivaricelosa y la vacuna contra la fiebre amarilla.

Por su seguridad y eficacia, las vacunas más recomendadas durante la gestación son la antitetánica, la antineumocóccica y la vacuna antigripal.

También la vacuna antipoliomielítica o vacuna Salk, cuando existe riesgo de exposición y la mujer es susceptible.
Además se recomienda llevar a cabo la aplicación de las vacunas luego del primer trimestre para disminuir los potenciales riesgos que conlleva este tipo de tratamientos.

Cuando se indica una vacuna a una mujer embarazada se deben considerar tres aspectos: si puede existir un riesgo aumentado de efecto adverso, si el riesgo de exposición de la mujer es alto y si la infección puede ser de riesgo para ella o el bebé.
En el caso de las vacunas recomendadas debe tenerse en cuenta que en nuestro país existe una reglamentación de aplicación obligatoria del esquema de vacunación antitetánica completo. Esto consiste en la aplicación de 5 dosis, presentes en las vacunas doble, triple, cuádruple, quíntuple y ahora también séxtuple. La persona que haya recibido por lo menos tres esquemas de dosis de vacuna antitetánica a lo largo de su vida, puede decir que ha recibido un esquema de vacunación antitetánico completo. No hay necesidad de aplicarse un refuerzo en cada embarazo si transcurrieron menos de 5 años de aplicación de la última dosis de vacuna antitetánica. La vacuna contra la gripe también es segura y se recomienda la vacunación antigripal en toda embarazada que curse su segundo o tercer trimestre durante el invierno.
Infecciones
 Frecuentemente se asocian a este período una serie de infecciones como la rubéola, toxoplasmosis, sífilis, herpes genital, chagas, hepatitis B, SIDA y varicela.

RUBEOLA

La rubéola es una enfermedad que no acarrea complicaciones durante la infancia, pero cuando se produce durante el embarazo puede ocasionar graves daños al bebé. Como el interrogatorio médico generalmente no permite definir con certeza si la paciente tuvo esta enfermedad en el pasado, ya que se la suele confundir con otras enfermedades que dan brote en la piel antes de embarazarse, es recomendable que toda mujer se realice un estudio de sangre que confirme la presencia o ausencia de anticuerpos específicos.
 En nuestro país, alrededor del 10 % de las mujeres en edad fértil no ha padecido rubéola, y se beneficiaría con la aplicación de la vacuna. Por lo tanto, si poseen posibilidades de enfermarse deberían vacunarse antes del embarazo o durante el puerperio.

Si bien la vacuna antirubeólica está contraindicada durante el embarazo, no se ha detectado daño fetal en los casos de mujeres embarazadas que recibieron la vacuna accidentalmente. Pero sí se recomienda esperar un lapso de tres meses desde la aplicación de la vacuna para embarazarse.

Detalles sobre infecciones y embarazo

TOXOPLASMOSIS

La infección por toxoplasmosis no es fácilmente detectable porque se adquiere por el contacto con gatos o al ingerir alimentos contaminados, como verduras crudas o carne poco cocida. El riesgo durante el embarazo es que la infección pueda transmitirse al bebé. Por ello es imprescindible que la mujer en la consulta médica mencione si ha tenido algún contacto con gatos y que se realice un análisis de sangre para determinarlo. Link Ministerio Salud

¿Qué es?
Es una enfermedad producida por un parásito que es eliminado en la materia fecal de los gatos.

¿Cómo se transmite?
La forma de transmisión al ser humano es por ingestión de carne contaminada y mal cocida, o por consumo de agua o verduras contaminadas con heces de gato y mal lavadas.
Asimismo, si una mujer la contrae durante el embarazo, también se la puede transmitir al feto.
Es importante aclarar que NO es transmitida por contacto directo con felinos.

¿Cuáles son sus síntomas?
En la mayoría de las personas, la infección es asintomática. La enfermedad puede afectar el cerebro, los pulmones, el corazón, los ojos o el hígado.
En el caso de las mujeres embarazadas es especialmente importante evitar la infección ya que puede causar enfermedad y secuelas graves en el feto, o incluso provocar un aborto, de acuerdo al momento de la gestación en que se produzca.
También es importante prevenirla en pacientes inmunocomprometidos, como personas trasplantadas o portadores de VIH.

¿Cómo se trata?

Si se detecta en mujeres embarazadas, es importante implementar el tratamiento médico lo antes posible a la madre, y posteriormente el tratamiento postnatal al recién nacido.
En el caso de las personas portadoras de VIH, se aconseja continuar dicho tratamiento en tanto el sistema inmunitario esté débil, con el fin de prevenir la reactivación de la enfermedad.

¿Cómo se puede prevenir?
Para evitar esta enfermedad se debe tener en cuenta:
1) Recolectar diariamente las heces de los gatos (que sólo pueden transmitir el parásito luego de las 48 o 72 hs. de la evacuación) y lavarse posteriormente muy bien las manos.
2) Limpiar diariamente la bandeja sanitaria de los gatos y lavarse bien las manos posteriormente.
• Cocinar bien la carne y lavar bien las verduras antes de consumirlas.
3) Extremar estas medidas en los casos de mujeres embarazadas y en pacientes inmunocomprometidos.

link Ropa para embarazadas

SIFILIS

En cuanto a la infección por sífilis, una enfermedad de transmisión sexual, debe estarse atento porque no presenta síntomas y afecta al bebé antes de nacer e incluso recién nacido. Se detecta mediante un análisis de sangre y existe tratamiento antibiótico antes del embarazo.

HERPES GENITAL

El caso del herpes genital, un virus que se transmite por vía sexual y produce úlceras recurrentes, es particular. Si la mujer lo ha padecido varias veces, existe riesgo de transmitirlo al bebé durante el parto, por ello es conveniente confirmar el diagnóstico y realizar en todo caso un tratamiento preventivo durante los últimos meses del embarazo, para reducir el riesgo de infección al recién nacido.

CHAGAS

Otra de las infecciones a la que la mujer debe estar atenta es el Chagas. Si bien la mujer con enfermedad crónica de Chagas tiene un riesgo menor del 5% de trasmitirla durante el embarazo, la mitad de los recién nacidos parecen sanos al momento del nacimiento. Es fundamental estar en conocimiento de la infección materna para realizar el tratamiento y curar al bebé, para evitar complicaciones cardíacas en la adultez.

HEPATITIS B

También de Hepatitis B, sin síntomas, una madre puede contagiar a su hijo recién nacido durante el parto o una cesárea y/o durante el amamantamiento. Un simple análisis de sangre puede marcar la diferencia.
 Los hijos de madres con hepatitis B deben recibir una vacuna y gammaglobulina específica en el momento del nacimiento para prevenir la infección del niño, ya que de contraer la enfermedad el bebé tendría un altísimo riesgo de desarrollar a futuro una infección hepática crónica, cirrosis u otras complicaciones.
Desde octubre del 2000 se aplica en nuestro país la vacuna contra la hepatitis B, iniciando la 1era. dosis horas después del nacimiento, y completando con la 2da. dosis al 2do. mes de vida, y la 3era. a los seis meses.

VARICELA

Y por último deberían tenerse en cuenta los antecedentes de varicela. De no haberla padecido es recomendable que la mujer se vacune antes del embarazo ya que si está embarazada sólo podrá vacunarse luego del nacimiento del bebé porque esta vacuna está contraindicada durante el embarazo.
Si se contrae varicela durante los primeros meses puede ser riesgoso para el bebé, pudiendo ocasionar malformaciones congénitas.

Dra. Liliana Vázquez
Coordinadora del área de Infectología 
Perinatal del FUNCEI.
Dr. Sergio Pasqualini
Director de Halitus Instituto Médico.


Infecciones y embarazo

SUSCRIBITE AL PORTAL INGRESANDO TU EMAIL, RECIBIRAS NOVEDADES.

    Tu e-mail (requerido)


    link Gimnasia para Futura Mamá